Mo Salah (Chelsea)
En 2014, José Mourinho descartó a un chico egipcio que consideraba frágil. Tras ser cedido a la Fiorentina, la Roma lo compró, y allí destacó sobremanera. No le tembló el pulso al Liverpool, que apostó fuerte por él en 2017. Ahora es una estrella mundial.
Thiago Alcántara (Barcelona)
Llegó en 2005 a la cantera, debutó con Guardiola en Primera en 2009 y ahí se quedó hasta 2013, cuando, aprovechando que no tenía los minutos que quería, Pep se lo llevó a Múnich por solo 25 millones. Ahora se habla de su retorno.
Jadon Sancho (Manchester City)
El City se lo llevó de la cantera del Watford en 2015, pero solo dos años después, exigiendo oportunidades que Guardiola no le daba, forzó su traspaso al Borussia Dortmund por menos de 9 millones. El próximo verano puede salir por tres cifras.
Marcos Alonso (Real Madrid)
Hijo y nieto de madridistas, a Marcos Alonso le llegó su oportunidad en el primer equipo, pero no hubo mucha paciencia para apostar por él, de ahí que probara fortuna en el Bolton. La Fiorentina lo catapultó a la fama y , tras una cesión al Sunderland, se marchó al Chelsea, donde continúa.
Kevin de Bruyne (Chelsea)
Un caso parecido al de Salah. El Chelsea lo cazó del Genk, pero nunca tuvo la suficiente continuidad ni confianza. El Wolfsburgo se lo llevó por 21 millones y lo convirtió en el mejor jugador de la Bundesliga. Dos años después, el City rompió la hucha por él. Su rendimiento es estelar.
Ciro Immobile (Juventus)
Con 19 años debutó en la Juventus, pero nunca hubo una apuesta real por él. Tras tres cesiones seguidas, el Genoa hizo valer la parte de los derechos que tenía de él. A medida que han pasado los años ha ido rompiendo en goleador.
Philippe Coutinho (Inter de Milán)
Uno de tantos talentos por los que apuesta el Inter a edad temprana. Cedido en el Vasco da Gama y en el Espanyol, cinco años después el Liverpool sí le dio esa confianza que nunca tuvo. Rompió y se convirtió en el fichaje más caro de la historia del Barça.
Mauro Icardi (Barcelona)
En 2008, cuando empezó a escribir sus páginas de gloria Leo Messi, llegó Icardi a La Masia desde las Islas Canarias. Todos destacaban su calidad, pero no se adaptó mucho personalmente y los técnicos le pedían un ADN Barça que no parecía tener. No hubo paciencia y se marchó.
Romelu Lukaku (Chelsea)
El Chelsea apostó por un portento goleador adolescente. Pero las exigencias llevaron a cederle, primero al West Brom, luego al Everton, que lo terminó comprando. Una lesión de tobillo pareció ser un freno a su carrera, pero el United le dio otra oportunidad y ahora golea en el Inter.