"Me quedo hasta junio", comentó Lucas Hernández en el vestuario del Atlético de Madrid. Unas palabras que llevaron la alegría y el alivio a los pasillos del Wanda Metropolitano, después de que el francés haya estado sonando durante todo el mes de enero para abandonar la capital española.
En plena pelea por el título de Liga y Champions, perder a un jugador como Lucas hubiera supuesto una complicación para el Cholo Simeone a la hora de configurar su esquema, en una etapa de la temporada en la que no está permitido ceder ni un solo punto.
Pese a que estuvo a punto de aterrizar en Alemania gracias a una oferta brutal del Bayern de Múnich, no solo en el aspecto deportivo, sino en el económico, ya que la fiscalidad llegó a elevar 16 millones de euros su oferta, hasta situarla en 96 'kilos', en los últimos días Lucas conoció que seguiría en Madrid, tal y como desveló 'El País'.
El mismo medio asegura que dicha cantidad dejó a los de Múnich totalmente descolocados y decantó a Rummenigge y a los dirigentes alemanes a aplazar seis meses la decisión de lanzarse a por su fichaje.
Además, una vez llegue junio, dicho problema de la fiscalidad por la nacionalidad de Lucas habrá quedado ya en el olvido, por lo que el valor de la cláusula del francés volverá a descender hasta los 80 millones de euros. Un motivo más del Bayern de Múnich para esperar hasta el próximo verano. Mientras, Lucas Hernández seguirá siendo jugador del Atlético de Madrid.