Va a ser un mercado sin precedentes. Muchos 'cracks' cambiarán de equipo y una cantidad de dinero sin precedente fluctuarás de unas arcas a otras. Pero aún no ha comenzado el efecto dominó. La 'culpa' la tienen los entrenadores.
Y es que hay banquillos cuyos dueños aún no están nada claros. Por ejemplo, nada más y nada menos que los cuatro clubes ingleses que protagonizarán las finales del 29 de mayo y el 1 de junio.
La política de incorporaciones y salidas de Tottenham, Liverpool, Chelsea y Arsenal están condicionadas a lo que ocurra. La salida de Pochettino y Sarri puede ser más que probable en función de lo que ocurra. En principio, Klopp y Emery tienen garantizado su futuro. No tanto sus futbolistas.
Y algunos como Eriksen, Hazard o Lacazette pueden ser algunos de los animadores del mercado.
Pero no acaba ahí la situación. Un equipo de la solera de la Juventus, pentacampeón italiano, se acaba de quedar sin su gran hombre. Se marcha Allegri, así que su sustituto, que por ahora no está nada claro, provocará una buena marejada.
Italia, no en vano, será de los países más activos. Claudio Ranieri dejará la Roma y se da por hecho que Luciano Spalletti tampoco continuará en Milán.
De Thomas Tuchel (PSG), Ole Gunnar Solskjaer (Manchester United), Niko Kovac (Bayern de Múnich) y hasta Pep Guardiola (Manchester City) tampoco se puede asegurar al cien por cien que continuarán donde están.
Aparte, ahí está José Mourinho esperando cazar algunos de ellos. Es tanto el trabajo por hacer, que los dirigentes no saben aún si aunar esfuerzos en unos u otros fichajes.