Salvo el Madrid, todos los clubes apoyan a Tebas y LaLiga: quieren jugar viernes y lunes

Presidentes y representantes de clubes celebraron una asamblea en la sede de LaLiga y se manifestaron en contra de la Federación. El caso va para largo: la Federación lanzó la prohibición, LaLiga recuerda que posee las competencias en materia de horarios y hay una vista a comienzos de agosto. Sólo el Real Madrid no respalda esta reacción contra la RFEF. 

Tras la reunión, los presidentes de varios clubes de Primera hablaron y llegaron a catalogar la decisión de la Federación como "ataque frontal a los clubes". Los equipos profesionales apoyan a Tebas en la llamada 'guerra de los horarios'.

"Es un ejercicio de responsabilidad, hemos adquirido unos compromisos con los operadores y no podemos cambiar las normas del juego porque eso nos repercute y perdemos credibilidad. Lo que hemos vivido es un ataque frontal contra los clubes", dijo Quico Catalán, presidente del Levante.

El presidente del Cádiz Manuel Vizcaíno apoyó a LaLiga. "He conocido una lIGA que debía 700 millones a Hacienda y con la mitad de clubes en concursos de acreedores. Hemos conseguido lo más difícil: con el nuevo convenio somos la mejor liga del mundo", comentó.

"En nombre del Atlético estamos preocupados por una invasion de las competencias de la Liga por parte de la RFEF. En base a los contratos, hemos firmado jugar viernes y lunes y es un compromiso con los futbolistas. Que los operadores dejen de pagar lo firmado es un peligro a los jugadores porque también les repercute a ellos", comentó Miguel Ángel Marín, consejero delegado del Atleti.

José Castro, presidente del Sevilla, defendió los contratos firmados con las televisiones: "Esos derechos han permitido que la Liga sea la mejor, que se pueda mantener el preciso de los abonos o que los propios clubes sean viables. Para crecer como Liga son imprescindibles".

 

31 de julio de 2019

Así está la 'guerra de los horarios'

LaLiga estableció el 12 de julio los horarios de las tres primeras jornadas del campeonato 2019-20, que según la patronal debe comenzar el viernes 16 de agosto a las 21:00 horas con un Athletic-Barcelona en San Mamés, en una primera jornada en la que el lunes 19 se disputarán un Mallorca-Eibar y un Betis-Valladolid.

Asimismo, en la segunda jornada programó dos partidos el viernes 23 (Granada-Sevilla y Levante-Villarreal) y uno el lunes 26 (Leganés-Atlético); y en la tercera dos partidos el viernes 30 (Sevilla-Celta y Athletic-Real Sociedad).

No obstante, el viernes 26 de julio la Jueza Única de Competición de la Federación Española de Fútbol modificó el calendario a través de una resolución en la que decidió que esos partidos pasaran a los sábados y domingos "ante las incompatibilidades detectadas entre el calendario aprobado y los días y horarios establecidos".

Ese mismo día, LaLiga manifestó a través de un comunicado que es "la única organización competente para fijar horarios y fechas en la competición nacional de fútbol profesional", por lo que, bajo su punto de vista, los partidos debían ser los viernes y los lunes, tal y como estaban fijados originalmente.

La patronal de clubes también apuntó que con estas decisiones, la RFEF pone en peligro un mercado de derechos audiovisuales que genera más de 2.000 millones de euros a los clubes, y recordó que este asunto deberá ser dilucidado de forma definitiva por parte de un Juzgado de lo Mercantil, ante el que hay una vista el 7 de agosto.

Este mismo miércoles, la Comisión Delegada de la RFEF aprobó las Bases de Competición de Primera y Segunda División, en las que, entre otras cuestiones, establecen que "cada jornada de competición oficial deberá disputarse los sábados o domingos", salvo que se produzca un acuerdo entre Federación y LaLiga.

Estas Bases también señalaban que las franjas horarias para iniciar los partidos serían los sábados entre las 12:00 y las 21:01 y los domingos entre las 11:00 y las 13:01 y entre las 17:00 y las 21:01 horas.

LaLiga y la Federación están citadas el 7 de agosto en una vista en el Juzgado de lo Mercantil acerca de quién tiene las competencias de fijación de horarios, de la que debería surgir una decisión cautelar que aclare si los partidos de las primeras jornadas ubicados en viernes y lunes se podrán jugar esos días o si deberán pasarse al fin de semana.