Neymar (Brasil, 222 millones)
El fichaje más caro de la historia fue el zarpazo del PSG al Barcelona. Y parece que así seguirá siéndolo.
Kylian Mbappé (Francia, 135)
135 fueron los millones que pagó el PSG al Mónaco, cesión con opción de compra mediante, para elevarlo a los altares siendo aún adolescente.
Joao Félix (Portugal, 126)
El mayor movimiento de la historia del Atlético de Madrid actualizó el anterior que había supuesto el traspaso de Cristiano del Real Madrid a la Juventus el verano anterior.
Gareth Bale (Gales, 105)
De los más madrugadores en llegar a la tres cifras, sin duda pasará tiempo hasta que otro galés sea vendido a precio de oro, como hizo el Tottenham.
Eden Hazard (Bélgica, 100)
Otro de los grandes nombres de la ventana de fichajes 19-20. Además, en la compra del Madrid al Chelsea se incluían variables que harán que ese precio suba.
Gonzalo Higuaín (Argentina, 90 millones)
Argentina es una fábrica constante de venta de talentos, aunque fue el paso del 'Pipa' del Nápoles a la Juve el que marcó el mayor listón.
Harry Maguire (Inglaterra, 87 millones)
El Manchester United mejoró la apuesta que antes había hecho el Liverpool por Van Dijk llevándose del Leicester al central a golpe de talonario.
Matthijs de Ligt (Holanda, 85)
Otro de los defensas más señalados de la historia bancaria del fútbol. Raiola creó una gran puja que acabó con los huesos del holandés del Ajax en Turín.
Luis Suárez (Uruguay, 82)
El Barcelona se gastó más de 80 millones en llevárselo de Anfield para que el delantero charrúa hiciera carrera en el Camp Nou.
Kepa Arrizabalaga (España, 80)
En plena pujanza económica de la Premier, el Chelsea abonó la cláusula de rescisión del joven portero para convertirlo en historia de LaLiga.
James Rodríguez (Colombia, 75)
Florentino Pérez se enamoró de él, por eso no dudó en presentar una tremenda oferta al Mónaco tras su gran Mundial en Brasil.
Zlatan Ibrahimovic (Suecia, 69)
Uno de los jugadores con más traspasos en la historia del fútbol dejó su marca más alta cuando el Barça se lo compró al Inter de Milán.
Jorginho (Italia, 57)
Maurizio Sarri tenía al italobrasileño como pilar en el Nápoles. Cuando se marchó al Chelsea, pidió a la directiva un tremendo esfuerzo por él. Tanto, que pasó a la historia.
Leroy Sané (Alemania, 50)
Pep Guardiola se enamoró del extremo alemán que la rompía en el Schalke 04. Antes de que llegara la inflación 'post-Neymar', el Manchester City invirtió medio centenar de millones en él.