Hablar de Manuel Miquel es hacerlo de un futbolista que, sin los focos de un equipo de Primera o Segunda, ha sabido recuperarse de una grave lesión de rodilla, la segunda que ha sufrido este jugador. Y, para colmo, en la misma pierna. Pura fuerza de voluntad la de este joven futbolista. El canterano cordobesista. desde su vuelta este 7 de enero, vuelve a ser una pieza fundamental en su actual club, el Jumilla. Desde su vuelta ha jugado seis encuentros, venciendo en cuatro y siendo derrotado en las dos restantes.
Comenzó su carrera en el Córdoba Club de Fútbol. Tuvo una gran explosión, llegando a debutar con el primer equipo con apenas 18 años. Debut y titularidad. Fue en la jornada 41 y, aunque el choque acabó con derrota ante el Mirandés, ya se había enfundado la blanquiverde en el Arcángel. La siguiente jornada también disputaría minutos, pero de nuevo se toparía con la derrota. Eso sí, los dos partidos con el club de su ciudad ya nadie se los quitaba. El 19 de agosto, el propio jugador confirmaba en redes sociales su fichaje por el Albacete.
Pero en el club manchego no le fue fácil. Consiguió jugar un encuentro de titular y disputar una hora en un partido de Copa, pero fue uno de los descartados por el míster del primer equipo, Luis César Sampedro, aceptando con total compañerismo su puesto en el filial. A pesar de ese inicial revés, el cordobés no se resistía y aprovechaba las pocas oportunidades que le permitía el entrenador. Allí estuvo dos campañas más, disputando un total de cuatro partidos.
No terminaría la segunda, ya que en el mercado invernal fichaba por el filial del Levante en calidad de cedido. Pero en apenas un mes de su fichaje, llegaba el primer revés duro para el futbolista. El 9 de febrero, ante el Lleida, se rompía el ligamento cruzado y se le quedaba afectado menisco y ligamento externo. El propio jugador reconocía que eran momentos muy complicados para él y la familia. Primer 'k.o.' que superar. En enero volvería a ser cedido, esta vez al Socuéllamos. No tenía apenas oportunidades. Pero todo cambiaría en la 2017-18. Finalizaba su contrato con el Albacete y fichaba por el Jumilla.
Fue fundamental para el equipo, hasta que un desgraciado 21 de enero de 2018 la lesión volvía a salir a escena. Y, de nuevo, la misma rodilla, pasando a vivir unos momentos complicados. El futbolista tenía que volver a empezar. El andaluz apenas tenía 23 años. El central tiene de nuevo un año complicado en el que muchas cosas pasan por la cabeza. La familia y los más cercanos apoyan lo que pueden y el futbolista se rehace con sufrimiento y sin los focos del mundo profesional.
Un 7 de enero de 2019, el jugador reaparece de titular y juega 81 minutos. Vuelve a ser futbolista. Dos jornadas después, un 20 de enero, el jugador cumple casi un año de la lesión y marca el segundo tanto, el que posteriormente certificaría la victoria para su equipo. Un final de cuento que hace demostrar una lucha en el futbolista que debe ser reseñable. Manuel Miquel desde entonces ha sido fundamental de nuevo en el club en el que ha conseguido volver a sentirse futbolista.