La sonrisa ha vuelto a borrarse del rostro de Maradona y los suyos. Tras ganar a Correcaminos, el conjunto de Culiacán se llevó un duro golpe ante Atlante en casa.
Los visitantes le endosaron seis tantos a su rival y el '10' no pudo seguir viendo la goleada. Tras encajar el 3-6, el 'Pelusa', que debía cumplir un partido de sanción, se levantó de su asiento en la grada y se fue.
Tras cinco jornadas disputadas, Dorados marcha con tres puntos en la tabla y ocupa la última posición. A Maradona le toca trabajar para darle la vuelta a la situación.