Después de quedarse sin la Recopa Sudamericana, Palmeiras firmó su particular venganza ante Defensa y Justicia y le ganó a domicilio (1-2), en un partido que acabó con bronca final.
Marcelo Benítez y Felipe Melo tuvieron sus más y sus menos tras el encuentro, lo que llevó a que la trifulca también tuviese lugar camino a los vestuarios, tal y como recoge 'ESPN'.
Se armó una buena en el túnel entre las delegaciones de ambos conjuntos y la policía tuvo que intervenir finalmente para calmar los ánimos. Y es que había muchas cuentas pendientes.