Vuelve el Real Madrid al feudo sevillista y lo hace con su capitán, Sergio Ramos, casi como persona 'non grata'. Aunque él sigue amando al club que le vio crecer, la grada no le perdona un gesto que tuvo durante la visita a la capital andaluza durante la 16-17.
Ramos, insultado por un sector de la grada, consiguió uno de los goles blancos del partido y provocó a esa parte de la hinchada que le gritaba palabras con intención de hacerle daño. Ramos se puso las manos en las orejas y el sevillismo, al completo, se encendió.
Tras esto, los regresos al que fue su estadio no han sido para nada acogedores, y este miércoles la grada del Pizjuán podría también dejarle algún que otro recado a Mariano Díaz, jugador del Real Madrid que estuvo muy cerca de fichar por el Sevilla.
De hecho, el delantero, según reveló Pepe Castro, presidente de la entidad andaluza, le dejó claro a la directiva sevillista su predilección por el club hispalense. "El Madrid va a ejercer la opción de tanteo que tiene, pero aún no tenemos la comunicación del jugador, que nos dijo una y otra vez que quería venir aquí", esas fueron las palabras de Castro horas antes de que se cerrara la vuelta de Mariano al Madrid.
Ese giro inesperado de 180 grados perjudicó al Sevilla, que llevaba días centrándose en la llegada de un Mariano que acabó cambiando la posibilidad de aterrizar en la capital andaluza por irse a Madrid. Habrá que ver cómo se lo toman en Sevilla...