Los merengues se llevaron con justicia los tres puntos contra un rival que se conformaba con el empate y no pudo frenar la mejora del Castilla con la entrada al campo de Álvaro Jiménez, que provocó el penalti, y Muñoz, que lució con galones el brazalete de capitán.
Con el feudo rival volcado en busca de un buen mordisco al ascenso, con 6.500 espectadores, el Barakaldo apenas inquietó al portero blanco en el minuto uno, cuando Yurrebaso le entregó un claro mano a mano.
Los locales, replegados, sufrieron en el primer tiempo pero los cambios en las filas del Castilla le sentaron mal. Mariano ya estuvo a punto de abrir el marcador en el 70', pero Juanjo lo evitó. No pudo hacer nada, sin embargo, a la segunda.
El dominicano no perdonó esta vez y en el minuto 83 marcó el gol del triunfo blanco.