Al más puro estilo Cristiano Ronaldo

Encadenar nueve partidos consecutivos en Liga encontrando portería no es nada fácil, pero 'fácil' no es una palabra que aparezca en el diccionario de Cristiano Ronaldo.

El delantero portugués anotó un doblete que le sirvió para entrar en la historia de la Juventus de Turín en la victoria ante la Fiorentina, pero lo hizo, eso sí, desde el punto de penalti, un detalle a destacar en toda esta hazaña. 

Los hombres de Maurizio Sarri sufrieron más de lo esperado en su feudo ante las continuas oleadas ofensivas de una Fiore más que firme en su objetivo, pero que se condenó a sí mismo con dos penaltis en su contra. 

El primero llegó después de que Pezzella cortara con la mano el zapatazo de Pjanic, momento en el que el colegiado acudió al VAR para comprobar la ilegalidad de la jugada y señalar la pena máxima.

Desde los once metros, a Cristiano no le tembló el pulso para imponerse a un Dragowski magistral durante todo el partido. Con la segunda parte ya en marcha, la historia se repitió, pero con otros protagonistas.

Esta vez fue Ceccherini el que perjudicó a su equipo derribando dentro del área a Bentancur. El resto de la historia, con VAR incluido, fue un calco del primer gol. El luso volvió a superar a Dragowski y firmó el doblete del partido. 

Con todo decidido y el duelo consumiéndose, llegó el tercer tanto de la Juventus, una goleada que no hacía justicia a la gran actuación de los de Florencia en territorio rival. 

De Ligt se sumó a la fiesta de CR7

Matthijs de Ligt se sumó a la fiesta de Cristiano, dando caza al tercer gol en Turín. El portugués llegó a rozar con la punta de su coleta el balón, pero le faltó un par de centímetros para enganchar el balón. No pasaba nada, ya que justo detrás de él estaba De Ligt para cabecear a las mil maravillas.

Un definitivo 3-0 para olvidar la derrota ante el Nápoles de la pasada jornada y mantenerse firme en la cima de la Serie A con 54 puntos en sus manos. Por su parte, los de Giuseppe Iachini tienen que conformarse con los mismos 25 puntos con los que llegaron a Turín, descendiendo hasta la decimocuarta posición.