Los detalles cobran vital importancia en la fase de grupos. Un gol redecora por completa las cuatro posiciones de un grupo. Y eso es lo que le ocurrió al Schalke 04 en la guarida del Lokomotiv. En el minuto 87, un buen testarazo de McKennie tras saque de esquina aupó a los alemanes a la primera posición.
A expensas del Oporto-Galatasaray, los pupilos de Domenico Tedesco salieron de la difícil Moscú con la primera plaza del grupo 4. Una victoria vital, pues descuelga al Lokomotiv, ahora a cuatro puntos de los alemanes, y le permite sacar tajada de lo que ocurra en Portugal.
El encuentro dejó una parte para cada uno. Los locales quemaron naves en la primera, donde tuvieron el balón y las ocasiones. Por entonces, como rival tenía al equpo timorato que está sorprendiendo negativamente en la Bundesliga.
Sin embargo, el paso por los vestuarios devolvió dos versiones diferentes. El Schalke 04 apretó mucho más y fue Guilherme el que tuvo que hacer las paradas.
No pudo con ese saque de esquina que el dorsal 2 del Schalke cazó a la perfección para volver locos a los alemanes.
En los minutos finales, salvo un centro envenenado, el arrebato desesperado de los locales no sirvió para nada. El 0-1 quedó inamovible. Y el grupo empieza a experimentar sus primeras fracturas.