Montañés volvió a disfrutar del fútbol ante el Sevilla Atlético. El centrocampista pudo jugar unos minutos en el encuentro frente al filial sevillista después de estar seis meses de baja.
"Me encontré bien, salvo que aún tengo que coger la forma física que tenía antes. Fue muy especial por el recibimiento que tuve y le doy las gracias a la afición por darme ese cariño", señaló el futbolista.
El mediocampista desvela lo mal que lo pasó con la lesión: "Soy ambicioso, no soy buen enfermo, me comía mucho la cabeza y tenía ansiedad por volver. No es fácil ver a tus compañeros entrenar y que tú no puedas hacer nada".
Por último, Montañés señaló que se dejará el alma para coger ritmo y tener minutos: "Me voy a dejar la vida para que el míster me dé los máximos minutos posibles, lo que te da la forma es el ritmo de los partidos e intentaré ganármelo en los entrenamientos".