Cuando eres joven haces lo que sea para comerte el mundo y así demuestras las grandes condiciones que tienes. Con apenas 20 años, José Juan Macías está dándose a conocer y la está rompiendo.
Si ya en León es clave, el 'Tata' Martino está viendo que es indispensable en la Selección Mexicana. En apenas tres partidos, el talentoso futbolista ha firmado cuatro goles y está llamado a ser el heredero de Chicharito.
Su última víctima fue Panamá, que hincó la rodilla en el Azteca por culpa del de Guadalajara. A los 'canaleros' les estaba saliendo el partido, pero un destello del '10' acabó con sus aspiraciones.
El encuentro arrancó con un dominio claro de México y las ocasiones no tardaron en aparecer. Hirving Lozano, muy activo en todo momento, lo intentó en varias ocasiones pero la suerte no estuvo de su lado.
Al jugador del Nápoles le anularon un gol por fuera de juego y encima se topó con el poste poco después. Y tras los intentos del 'Chucky', Alvarado batió a Mejía tras una gran acción dentro del área.
Con ese tanto, Panamá no se vino abajo y en su primer acercamiento al área contraria llegó el gol. Centro de Gabriel Torres al corazón del área y Salcedo, sin querer, metió el balón en su propia portería. 1-1 y murmullos en el Azteca justo antes de la llegada del descanso.
Tras la reanudación, el 'Tri' se llevó un buen susto. Gudiño apareció de manera clave para evitar el 1-2 de Rodríguez, que se echó las manos a la cabeza por la ocasión desperdiciada. Los nervios en los Hirving, Pizarro y compañía eran evidentes y sabían que tenían que dar la cara.
Para colmo de males, el 'Chucky', que recibió cera de la buena durante todo el encuentro, cayó lesionado tras recibir un pisotón involuntario de Fidel Escobar, que hizo un buen partido en el cuerpo a cuerpo con sus rivales.
Panamá estaba conforme con la manera en la que transcurría el encuentro hasta que el 'Tata' llamó a Macías y eso fue la perdición de los 'canaleros'. Con apenas nueve minutos en el campo, la perla mexicana presentó sus credenciales tras sacarse un golazo de la manga dentro del área.
El derechazo fue imparable y eso dio alas a su Selección, que cerró el partido en los últimos instantes del choque. En el 92', Pizarro, previa asistencia de Antuna, fusiló a Mejía y dio tranquilidad a la grada.