Atacaba el Nápoles, claro dominador del duelo hasta ese momento (y de ahí en adelante), cuando el balón llegó al mexicano Hirving Lozano.
El joven internacional azteca levantó la cabeza y vio la internada por banda de Di Lorenzo, y para él fue el balón. Con un simple pase, el Nápoles acababa de desbaratar la defensa de la Sampdoria.
El carrilero italiano solo tuvo que devolver de primeras el pase, con cierta fortuna, pues pasó entre las piernas de Murru, quien tratata de bloquearlo.
En la zona de remate esperaba el propio 'Chucky', pero también Mertens, y este, mejor posicionado, metió el pie y adelantó al Nápoles.