Pobre de aquel equipo que tenga que jugar con un Leo Messi en barbecho. Cuatro encuentros sin gol del argentino parecían demasiado para un goleador de su talla. Y, claro, ocurrió lo que muchos temían: que una vez hecho el tanto del fin de la racha, estallara de manera volcánica su talento.
Que se lo digan al Eibar, que volvió a sufrir la ira del argentino. El 19 de septiembre de 2017, cuando los 'armeros' cayeron por 6-1 en el Camp Nou, el rosarino hizo cuatro de esos tantos. Volvió a ocurrir. Esta vez para un 5-0 con Leo en modo tirano.
Aunque Arthur, de manera extemporánea, selló la 'manita', hasta entonces había sido un Messi 4-Eibar 0. El festival anotador del argentino que fue la séptima vez en su carrera que conseguía al menos cuatro tantos en un mismo partido. Curiosamente, todas ellas en el Camp Nou.
El primero de ellos tuvo lugar en abril de 2010, en una noche mágica de Champions ante el Arsenal (4-1). Fue ante el Valencia cuando tuvo lugar el primero de ellos en Liga. El Valencia, en la temporada 11-12, lo sufrió en sus carnes.
La tercera vez de su cuenta particular fue la segunda en la máxima competición continental, y vino con una particularidad, puesto que no fueron cuatro, sino cinco las veces que anotó el argentino en el abusivo 7-1 sobre el Bayer Leverkusen.
El siguiente en pasar por el quirófano fue el Espanyol, que encajó un 4-0 con la firma única de Leo Messi (dos de ellos de penalti). El rosarino cerró así una campaña 11-12 mágica, puesto que en ella tuvieron lugar también los señalados encuentros ante el Valencia y el Bayer Leverkusen.
Un 5-1 a Osasuna el 27 de enero de 2013 detuvo temporalmente la racha del azulgrana marcando al menos cuatro tantos en un mismo choque, pues de ahí ya se pasó al primero de los dos al Eibar.
En la carrera de los grandes por moverse en estas cifras de otro planeta, el último que lo había conseguido había sido Robert Lewandowski. El polaco había hecho un póker histórico en casa del Estrella Roja.
22 de febrero de 2020