La primera parte del Rayo Vallecano-Girona parecía tener un guion escrito adrede por alguien con ganas de emociones fuertes. Se vieron golazos, alternativas en el marcador y, sobre todo, un penalti indirecto que dejó helada a la grada.
Óscar Trejo había puesto el 2-1 con un tiro a la escuadra después de que los visitantes empatasen, por medio de Tsygankov, el golazo inicial de Isi. Y poco después, serían los dos jugadores del Rayo los protagonistas de la jugada de la jornada.
El argentino asumió la responsabilidad de tirar desde los once metros tras una falta en el área de Arnau sobre Álvaro. Gazzaniga le paró el lanzamiento, pero Riquelme, que despejó a córner, había entrado antes de tiempo en el área. El VAR, tras unos segundos, le indicó a González Fuertes que la pena máxima debía repetirse.
En esta ocasión, Trejo no repitió lado. De hecho, es que no repitió ni lanzamiento, ya que eligió pasarle el balón a Isi en el área. Ya lo hicieron Cruyff con Neeskens y Messi con Suárez en dos penas máximas que acabaron en gol. Pero esta no corrió la misma suerte: el '7' mandó la pelota por encima del larguero y Vallecas se quedó completamente en silencio.
March 18, 2023