"Estamos todos dolidos, pero hay que levantarse y saber que conseguir objetivos cuesta mucho. Aún así dependemos de nosotros mismos, pero hoy no hemos hecho nada bien. Hemos hecho todo mal. Un equipo competitivo como el Alcorcón nos ha superado con creces", dijo Míchel en rueda de prensa.
El técnico madrileño hizo autocrítica y reconoció que su equipo no jugó bien. Aún así, sigue manteniendo una ventaja de cinco puntos con el tercer clasificado a falta de dos jornadas.
"Es un día triste, queríamos un objetivo espectacular, y la decepción es grande. No nos ha salido nada bien. No estábamos muy metidos. Enfrente ha estado un rival que se juega la vida, que ha tenido más intensidad y más actitud", reconoció.
"Ahora el equipo está jodi** y es normal, pero es casi bueno que estemos así. Conseguir un objetivo como un ascenso es muy complicado y muy difícil. Es un día difícil, jodido, triste y el resultado es una gran decepción, pero tenemos la sartén por el mango. Lo tenemos ahí y vamos a intentar conseguirlo", concluyó.