"Creo que fue un buen partido con dos errores ridículos. A veces los haces y no eres castigado. Hoy, lo fuimos", explicó el preparador portugués en la rueda de prensa posterior al encuentro, que terminó con victoria local (2-1).
Mourinho reconoció que los "blues" cometieron un tercer error, cuando Danilo a punto estuvo de marcar el 3-1 en un cabezazo a la salida de un córner que acabó en el palo, pero insistió en que el duelo fue "equilibrado" y que sus hombres también dispusieron de buenas oportunidades.
En este sentido, hizo alusión a un penalti por manos del español Iván Marcano en los instantes finales del partido que el árbitro, el también español Mateu Lahoz, no pitó.
"Cuando juegas y es un desastre, es fácil tomar decisiones drásticas. Pero cuando juegas como hoy, es más difícil", subrayó Mourinho en relación al rendimiento de sus futbolistas.
El técnico portugués aseguró, asimismo, que confía totalmente en las opciones de su equipo para clasificarse a la siguiente fase de la Liga de Campeones pese a la derrota de hoy.
Sobre su regreso al campo del Oporto -entrenó dos temporadas al conjunto portugués entre 2003 y 2005 y ganó una Champions-, Mourinho reconoció que la única concesión emocional que se permitió fue "no festejar el gol".