"Creo que el United ha entendido que no soy el monstruo que la gente dice que soy. No soy ni tan malo, ni tan arrogante, ni tan difícil para trabajar. Al menos ninguna persona sale corriendo cuando llego al campo de entrenamiento", expresó Mourinho.
El técnico portugués reivindicó su papel dentro del club: "Pienso que soy mejor que lo que ustedes (los medios) piensan. La gente está contenta de poder trabajar conmigo. La relación con los futbolistas es buena. También la de los directivos, que no es únicamente profesional. Por lo tanto estoy feliz".
El futuro de Wayne Rooney en el equipo preocupa a Mourinho. "Hasta el final de la temporada él (Rooney) estará al 100% con nosotros. Para la siguiente me gustaría al 100% que siguiese aquí, pero eso no lo puedo asegura", manifestó para terminar.