El pragmatismo de Marcelino se impuso al romanticismo de Setién, que salió valiente a Mestalla, queriendo dominar a un conjunto 'che' que tiene ya hechuras de equipo de Champions League.
En un alarde de arrogante personalidad, el Valencia se dejó dominar en su casa, exhibiendo los colmillos sin piedad a una pueril defensa verdiblanca, frágil en las transiciones.
Entre Guedes y Gayà, el conjunto local fue descosiendo al visitante, percutiendo sobre el costado de Barragán para resquebrajar la zaga andaluza con asiduidad.
Aunque el Betis tenía el balón, la falta de profundidad hacía de los de Setién un equipo previsibile y vulnerable para salir al contragolpe. Demasiadas facilidades para los de Marcelino.
Apenas habían transcurrido los primeros 20 minutos, cuando Guedes recuperó en su campo, levantó la cabeza y cominó en largo con Rodrigo, que aprovechó un grosero error de Amat para fusilar a Adán.
El gol del Valencia sembró de dudas al Betis, que empezaba a dar síntomas de impotencia al no poder romper el entramado defensivo 'che', comandado por un imperial Kondogbia.
Lesionado Santi Mina, Marcelino dio entrada a Zaza para mantener la amenaza al contragolpe sobre el área verdiblanca, hábitat natural del delantero italiano.
Intentó reaccionar el Betis tras el descanso, pero el Valencia dictó sentencia tras la reanudación, golpeando con contundencia sobre la moral afligida del cuadro visitante.
La enésima galopada de Rodrigo acabó con Mestalla pidiendo un penalti que no sancionó el colegiado, pero cuyo ruido sí aprovechó Kondogbia para enlazar con Zaza, que no perdonó y fusiló a Adán con rabia para encararse a la grada.
Hundidos en sus miserias, los de Quique Setién deambularon groguis sobre el césped, superados en todas las líneas por el apabullante vértigo 'che' en carrera, hasta que Joaquín se echó el equipo a la espalda.
Sin embargo, el capitán verdiblanco no pudo liderar semejante hazaña, a pesar de convertir Mestalla en un correcalles que sólo diversos milagros vestidos de Adán evitaron mayores movimientos en el resultado.