El centrocampista francés es duda para el partido frente al Liverpool, pero su fichaje por el West Ham hace recordar a este tipo de peticiones que Pellegrini ya hizo en otros equipos. Nasri pasó por un proceso complicado tras cumplir la sanción impuesta por la UEFA por someterse a un tratamiento de vitaminas que la Agencia Mundial Antidopaje no aprobó. Su caso es algo especial, pero el entrenador chileno ya rescató a futbolistas que no pasaban por el mejor momento de su carrera años atrás.
El 'Ingeniero' comenzó su etapa en los banquillos en su país, en Chile, pero le llegaría la oportunidad con San Lorenzo en la temporada 2001-02. Ganó dos títulos y River Plate llamó a su puerta. Solo estuvo un año en el 'Millonario', pero fue lo suficiente para sumar un campeonato más, ganando el Clausura. Dos años que no pasaron desapercibidos en Europa.
El Villarreal apostó por él para que liderase un proyecto ambicioso. Ahí entró en escena la figura de Juan Román Riquelme. El futbolista argentino, que había pasado sin éxito por el Barcelona, decidió abandonar el conjunto azulgrana para poder volver a demostrar la calidad que se le vio en Boca Juniors. Y el cuadro 'groguet' le vino como anillo al dedo. Pellegrini logró sacar su máximo potencial y ambos llevaron al Villarreal a unas semifinales de la Liga de Campeones en 2006. Todo cambió en los últimos coletazos de Riquelme en el equipo amarillo. Tuvo varias discusiones con el técnico y el club optó por dejar salir al futbolista.
El turno de Julio Baptista llegó en la temporada 2010-11. El chileno había llegado a un Málaga que se reforzó en el mercado invernal para salvar la categoría. El brasileño fue precisamente uno de los fichajes tras pasar sin pena ni gloria por la Roma en sus últimas campañas. La 'Bestia' rindió a un nivel espectacular los últimos partidos de campaña y fue crucial para la salvación del cuadro andaluz, que años después acabaría llegando a los cuartos de final de la Champions, también con Baptista como protagonista.
Pellegrini dejó el Málaga en el curso 2013-14 para poner rumbo al Manchester City en un nuevo proyecto ambicioso. En su segundo año, el chileno convenció a Frank Lampard, que había dicho adiós al Chelsea para colgar las botas o dejar el fútbol europeo, para que disputase una temporada en las filas del cuadro 'citizen'. No solo firmó, sino que llegó a disputar 38 encuentros, aunque la mayoría de ellos partiendo desde el banquillo. El inglés fue otro de los rescates de Pellegrini.
Una suculenta oferta del Hebei China Fortune le hizo dejar el Viejo Continente para iniciar una nueva aventura. Ahí entró en escena Ezequiel Lavezzi, que había bajado su rendimiento en el Paris Saint-Germain durante los últimos años. Pellegrini optó por su fichaje y, en su segunda temporada, marcó 20 goles en 27 partidos con 32 años.
El último ha sido Nasri, que estuvo 18 meses parado sin poder jugar por la sanción de la UEFA. Sus molestias le hacen ser duda ante el Liverpool de Jürgen Klopp, uno de los viejos conocidos por Pellegrini. Su amargo recuerdo, aquella fatídica noche para el Málaga en Dortmund, todavía le debe estar rondando por la cabeza al 'Ingeniero'.