Necaxa, equipo que tiene como uno de sus accionistas al futbolista alemán Mesut Özil, destacó en las últimas cuatro temporadas por ser una máquina en generar ganancias millonarias en fichajes.
Este fue uno de los atractivos que llevó a varios inversionistas a comprar el 50% de las acciones de Necaxa. El grupo lo encabezan Özil, la modelo Kate Upton, el lanzador de los Astros de Houston, Justin Verlander; el jugador del Heat de Miami, Victor Oladipo; los ex baloncestistas Richard Hamilton y Shawn Marion y el esquiador campeón olímpico Bode Miller, a comprar el 50% de las acciones del Necaxa.
Entre las mejores transacciones de Necaxa en las últimas cuatro temporadas destacan las de los chilenos Víctor Dávila, comprado por 219.625 dólares y vendido a Pachuca por 12,9 millones y Edson Puch, adquirido por 549.063 dólares y vendido al mismo Pachuca por 7,5 millones.
Joel Tepetla, ex integrante del área de inteligencia deportiva de Necaxa, reveló a 'EFE' la fórmula con la que el conjunto hidrocálido ha conseguido jugadores baratos a los que vende más caros.
El experto en análisis táctico dijo que el área de inteligencia deportiva, liderada por José Manuel Morales, hace el seguimiento de diferentes ligas de fútbol alrededor de América como la ecuatoriana, uruguaya y argentina.
En los países americanos ven no solo la Primera división, sino las categorías inferiores en busca de jugadores con un mismo perfil sin importar la posición: futbolistas no mediáticos para que no sean costosos y que tengan entre 19 y 21 años de edad para que en por lo menos un año puedan ser vendidos.
"El chiste es buscar aquel jugador que nadie mira, pero que va a explotar, que tengas las capacidades de ver su cualidades técnicas y tácticas", explicó Tepetla. El también director técnico comentó que el área deportiva se apoya en entrenadores de fuerzas básicas del club para que sea más rápido y eficiente desmenuzar las ligas.
Una vez que se tienen a los prospectos, se depura la lista y los mejores son presentados a los directivos encabezados por el director deportivo Santiago San Román. Antes de ficharlos, gente de Necaxa viaja a los países de origen para conocer el entorno del jugador y con ello tomar la decisión de forma objetiva.
Gracias a este modelo de negocio, Necaxa, con uno de los presupuestos más bajos de la Liga MX, opera con un balance positivo, aunque en lo deportivo, el club no ha podido ganar un título de Liga hace más de 22 años.
En estas cuatro temporadas, el equipo logró clasificar en tres torneos de ocho a la fase final, con su mejor resultado llegar a las semifinales en el Apertura 2019, pero su afición no tuvo un crecimiento considerable. según datos de la encuesta de Consulta Mitofsky que ubica al Necaxa con la novena afición más pequeña la Liga MX.
El experto en negocios deportivos, Rodrigo Mort, expresó que la venta de forma tan seguida de futbolistas estrellas genera una falta de identidad en los aficionados de Necaxa.
"La percepción es que no pueden crear ídolos referentes del club como antes se hacía, con sus figuras de los años 90. Las cosas cambiaron, ahora no se pueden comprar como antes y los aficionados deben entender la estructura económica y deportiva de un club como Necaxa no es la que era", comentó.
A largo plazo, Mort dijo que el modelo de negocio del Necaxa de comprar futbolistas baratos y venderlos más caros no es sostenible, por lo que espera que la llegada de capital extranjero le dé estabilidad al conjunto para con ello consolidarse en lo deportivo y con ello capitalizar su mayor atractivo, poder conquistar el mercado de mexicanos en Estados Unidos.