La resistencia del Becerril sobre el césped duró 37 minutos, un registro nada desdeñable para las circunstancias. Y es que un bicampeón de la Liga visitaba, en un campo ajeno, a un equipo de un municipio de poco más de 750 habitantes.
Pero la ilusión del cuadro de Castilla y León sí que aguantó todo el encuentro, el chaparrón climatológico y el de goles de los visitantes. Porque la Real celebró hasta ocho dianas, pero la grada de La Nueva Balastera, repleta de seguidores, fue impasible a ello.
Le Normand y Januzaj, que fue el mejor del encuentro con una gran actuación y tres tantos, llevaron el 0-2 al descanso, resultado que aumentaría en el primer minuto del segundo acto. El ex del United lograba su doblete.
Pardo, tres minutos más tarde, puso el 0-4. A partir de ahí, el Becerril logró parar la sangría, al menos, durante 15 minutos. Fue entonces cuando Januzaj clavó una falta a la escuadra para poner el 0-5 en el marcador.
Sevi, portero local, tuvo buenas actuaciones pese al resultado. No pudo hacer nada ante el primer tanto de Isak, que hizo el 0-6 en el 68' tras fallar un penalti minutos antes, ni ante el de Barrenetxea, un minuto después.
Ya en el minuto 75, Isak firmó su doblete al aprovechar el rechace del meta y cerró la goleada. Un 0-8 que, por muy escandaloso que sea a la visto, no pudo con la hazaña histórica del Becerril, equipo que ya cuenta con la simpatía del fútbol español.