"Estoy descansando, bien, y todavía no sé qué voy a hacer. Lo más importante es la decisión que tomé. El resto ya se verá", dijo en un acto promocional de Adidas en Saint Denis, en las afueras de París.
Esa duda planea también sobre la petición del propio presidente de Francia, Emmanuel Macron, de que tenga un papel relevante en el país galo.
A la selección de su país se refirió precisamente, con licencia para soñar: “Este equipo tiene un potencial real. Espero que llegue lo más lejos posible y, por qué no, que gane la Copa del Mundo”.
Más concretamente, tuvo palabras de elogio para Mbappé, llamado a marcar una época con el combinado 'bleu'.
"Es fabuloso para la edad que tiene. Tienes que dejarle hacer lo que sabe porque siempre tomará la decisión correcta”, ponderó.
Zidane, de 45 años, dio por finalizados en mayo dos y medio como entrenador del Real Madrid, en los que ganó tres Ligas de Campeones consecutivas (2015/16, 2016/17 y 2017/18), una Liga (2016/17), dos Supercopas de Europa (2016 y 2017), dos Mundiales de Clubes (2016 y 2017) y una Supercopa de España (2017).
En Saint Denis, se encontró este lunes con Laurent Blanc y otros compañeros de la selección de Francia en 1998, ganadora del Mundial, la víspera de un partido con el que conmemorarán los 20 años de ese triunfo por 3-0 contra Brasil.
Su día a día se ha convertido en una balsa de aceite. Todo lo contrario que para Florentino Pérez, quien va camino de enlazar dos semanas sin entrenador y, peor aún, sin un panorama que se pueda resolver a corto plazo.
Eso sí, el club ya se ha marcado una hoja de ruta con un plazo claro para no demorar más la planificación de la próxima temporada.
El de Villas-Boas ha sido el último en unirse a una lista donde Pochettino parece seguir siendo el mejor colocado, aunque sin desdeñar las opciones de Jürgen Klopp, Allegri o Conte, entre otros.