Al Racing de Santander, sobre todo, no le vale el punto que obtuvo en El Sardinero. El equipo continúa en la penúltima posición después de empatar en el que fue su noveno encuentro consecutivo sin vencer. Iván Ania tenía un pie y medio fuera del banquillo, pero el empate de Nuha podría haberle dado una vida extra.
Tampoco le valió a la Ponferradina. Los de El Bierzo desperdiciaron la oportunidad de firmar el mejor arranque del club en las siete campañas que ha estado en Segunda División.
Perdonaron numerosas oportunidades para sentenciar el duelo y terminaron concediendo las tablas. Aun así, se mantienen a solo dos puntos del 'play off' de ascenso y suman ya seis compromisos seguidos sin caer derrotados.
Los de Bolo se apoyaron en Ríos Reina para intentar crear peligro sobre la portería de Luca Zidane. El sevillano monopolizó la mayoría de las jugadas de ataque de su equipo durante los primeros 45 minutos. Lo intentó con dos lanzamientos desde la media distancia, si bien el meta racinguista respondió con seguridad.
El cuadro montañés entró al duelo con miedo. Le costó adaptarse al ritmo que propuso la Ponfe, pero, pasado el ecuador del primer acto, comenzó a encontrarse cómodo y a buscar la manera de hacerle daño al conjunto visitante.
Enzo Lombardo, uno de los más activos de los suyos, y David Rodríguez se encontraron con un José Antonio Caro que ha conseguido asentarse en la alineación titular de la Deportiva, precisamente, por partidos como el de El Sardinero.
Tras la pausa, Álvaro Cejudo avisó con un disparo desde la frontal y, solo dos minutos después, aprovechó un rechace en el corazón del área para batir al guardameta onubense y pintar una sonrisa en la cara de los aficionados locales.
Aunque no les duró mucho la felicidad. Diez minutos después del 1-0, Isi Palazón recogió una asistencia de Yuri y, con el exterior de su pierna menos buena, mandó el balón a las mallas.
El empate le sentó de maravilla a la Ponferradina, que se volcó hacia el ataque y encontró numerosos espacios en la defensa cántabra. Hasta tres mano a mano perdonaron los visitantes, pero Olaortua cometió una pena máxima sobre Yuri que el propio brasileño se encargó de transformar.
El Racing, noqueado, no se sobrepuso al 1-2 y los de Bolo disfrutaron de numerosas oportunidades para sentenciar el encuentro. Sin embargo, fueron misericordiosos y Nuha les castigó. Solo cuatro minutos después de haber saltado al campo, el gerundense volvió a firmar las tablas con un gol que el VAR tardó cinco minutos en validar.
En el tiempo de prolongación, Moi Delgado se fue expulsado y Nacho Gil volvió a perdonar el tercero con un disparo que se marchó alto. Al final, insuficiente reparto de puntos para ambos conjuntos.