El duelo entre Manchester United y Liverpool ha sido aplazado y no tendrá lugar este domingo 2 de mayo tras las revueltas ocurridas en Old Trafford y el hotel de concentración del cuadro mancuniano.
Una decisión confirmada por los 'red devils' y también por la propia Premier League tras unos incidentes que comenzaron con el asalto e invasión del estadio del United por parte de algunos aficionados del equipo en señal de protesta contra los Glazer, propietarios de la entidad.
"Tras mantener conversaciones con la Policía, la Premier League y los clubes, nuestro duelo frente al Liverpool ha sido aplazado por motivos de seguridad debido a las protestas de este domingo. Ahora comenzarán las conversaciones con la Premier League para buscar una nueva fecha para el duelo", comenzaba el escrito del United.
"Nuestros aficionados tienen una gran pasión por el Manchester United y reconocemos su derecho a la libertad de expresión y protestar de manera pacífica. Sin embargo, hemos de lamentar lo que le ha ocurrido al equipo y las acciones que han puesto en peligro a otros hinchas, a nuestro personal y a la Policía. Agradecemos a las autoridades su apoyo y ayudaremos en cualquier investigación posterior", concluía el mismo.
Posteriormente, la Premier League también lanzó un escrito para explicar lo sucedido y la decisión tomada de suspender el gran choque de Inglaterra.
"Tras los incidentes que pusieron en riesgo la seguridad en Old Trafford, el duelo entre Manchester United y Liverpool ha sido pospuesto. La decisión ha sido colectiva tras conversar con la Policía, las autoridades locales y los clubes. La seguridad de todos en Old Trafford es de suma importancia. Entendemos y respetamos la pasión y el sentimiento, pero condenamos los actos de violencia, los daños y la invasión que se han producido, sobre todo porque se incumplen los protocolos sanitarios asociados al COVID-19", explicó.
"Los hinchas tienen muchas formas para dar a conocer sus puntos de vista y opiniones, pero las acciones acometidas este domingo por una minoría no tienen justificación. Mostramos nuestro apoyo a la Policía y los comisarios que tuvieron que lidiar con una complicada y peligrosa situación que no debería tener cabida en el fútbol", sentenció.