Oier, en rueda de prensa tras el entrenamiento en Tajonar, afirmó que no asusta la distancia respecto a los dos puestos de ascenso directo, aunque dijo que obviamente les gustaría estar más cerca.
"Vamos a tomárnoslo con naturalidad. Sabíamos que podría haber momentos de turbulencias", indicó.
El defensa navarro subrayó que está convencido de lo que dice el entrenador, Diego Martínez, y del trabajo realizado: "El equipo ha demostrado que es capaz de hacer buen fútbol y de ser muy sólido, de ser un buen equipo de fútbol, y seguro que volverán esas sensaciones".
Oier admitió que es verdad que en este último mes dieron un paso atrás, pero remarcó que la línea de trabajo desarrollada es el camino correcto.
Osasuna cerrará el año 2017 en Lorca, equipo situado en puestos de descenso y que acaba de destituir a su entrenador, por lo que una victoria contra el equipo murciano se presenta vital ante el parón navideño.
"Estamos focalizados en el partido del miércoles. Sería extraordinario ganar en un campo como el del Lorca, un rival difícil de batir en su estadio, pero nosotros creemos en nosotros mismos y en lo que proponemos, y tenemos opciones de sacar los tres puntos", manifestó.