La realidad del Ibiza en Segunda División es muy negra. Y es que el conjunto pitiuso está viviendo una temporada futbolística lejos del nivel que mostró el año pasado en su primera aparición en la categoría de plata. El colista del campeonato volvió a perder en un duelo en el que peleó y luchó, pero no ganó.
Esta vez, Can Misses no pudo celebrar los tres puntos ante un Andorra decidido y que va con paso firme rumbo al 'play off', puesto que alcanzó tras este buen triunfo sobre suelo balear. Los visitantes llevaron la batuta al comienzo y la buena predisposición inicial provocó una de las dos jugadas decisivas.
Germán Valera le ganó la espalda a Goldar por la izquierda y el defensor le incomodó hasta que cayó al suelo. Estuvo decidido el árbitro, que señaló rápidamente los once metros. Es por ello que Bakis puso el 0-1 definitivo en el minuto once, dejando muy tocados a los muchacos que dirige Carlos Sánchez.
Lejos de arrugarse, los ibicencos se fueron al ataque en busca de ese empate soñado, pero la falta de acierto y las buenas acciones defensivas de los andorranos dejaron en nada las intentonas locales. En el 34', fue Goldar el que remató muy bien, pero Hevel estuvo concentrado bajo palos para sacar la pelota.
En la reanudación, bien pudo haber puesto el Andorra tierra de por medio, pero el derechazo de Albanis desde muy cerca de la portería se fue fuera lamiendo el palo. A partir de ahí, los de casa se hicieron dueños del balón y redujeron el juego del ahora sexto posicionado. Todo eso después de un claro gol anulado a Bakis por fuera de juego.
Los cambios hicieron efecto en los locales y el ambiente cogió un rumbo encaminado al empate, pero de nuevo una acción aislada decantó la moneda de cara de sus rivales. Morante pisó sin querer en el tobillo a Bover y vio la amarilla, pero el VAR llamó al árbitro y tras verlo en el monitor, le enseñó la roja directa al jugador del Ibiza.
Un castigo que dejço a los de Carlos Sánchez con uno menos, pero que fue todavía mayor diez minutos más tarde. Un recién entrado Pape Diop entró con fuerza desmedida a un balón dividido con su pierna en alto. Los tacos impactaron en un rival y el colegiado, esta vez sin dudar, echó al mediocentro.
Con dos jugadores menos y con la ventaja en el marcador, el Andorra se dedicó a tocar la pelota y dejar que el tiempo pasara. Incluso Jacobo tuvo en sus botas el 0-2, pero su volea se estrelló en el travesaño. Finalmente, tres puntos que dejaron a los de Sarabia en puestos de 'play off', mientras que el Ibiza se sigue hundiendo.