El entrenador del Celta, Óscar García, lamentó este sábado que su equipo no haya podido lograr el triunfo en Ipurua (0-0), un resultado que para él habría sido merecido, pero que no llegó por la falta de definición.
"Hemos tenido tres ocasiones claras de ganar, como la de Brais sólo ante el portero o las de Nolito, mientras que nuestro guardameta sólo ha tenido que intervenir en una, por eso creo que en el cómputo global estuvimos más cerca del triunfo que ellos", resumió el técnico del Celta.
Preguntado por el partido de Emre Mor, no quiso individualizar en un jugador ya que para él lo que importa es el colectivo, pero sí destacó que cuando el futbolista turco "está centrado y entrena bien, siempre puede ayudar" si bien, a su juicio, "ganar el partido es cosa de todos los compañeros".
No se mostró preocupado por la falta de gol, porque dijo estar convencido de que "no tiene porqué ser siempre igual y lo importante es generar ocasiones porque ya llegarán" los tantos.
El técnico catalán eludió pronunciarse sobre la necesidad de refuerzos, un debate presente en todos los equipos de Primera a estas alturas de temporada, y manifestó estar "muy contento" con la plantilla que tiene, aunque admitió que "todo lo que se pueda reforzar, siempre es positivo".