Y es que Cerro puso la puntilla al partido con un gol de esos que dan la vuelta al mundo. Jorge Rojas entró por un costado al área y vio entrar por detrás a Hernán Novick. No se le ocurrió mejor manera de asisterle que tirándole un increíble taconazo.
Pero la cosa no quedó ahí. Novick convirtió su gran pase en obra de arte. Le tiró un caño con la espuela de primeras a su defensor y de rosca la clavó muy cerca de la escuadra de la portería de Luqueño ante la incredulidad de todos los presentes.
Uno de los mejores goles de este 2018 y que podría competir a final de año por llevarse el famoso Premio Puskas.
25 de marzo de 2018