Los madrileños están progresando adecuadamente en sus primeros pasos por Segunda División. El objetivo es ascender y el técnico ya dejó claro que, en caso de no conseguirlo, será exclusivamente su culpa. Por ahora, siguen invictos en el campeonato con dos empates y una victoria.
El siguiente choque será duro, pues el contendiente es el Girona, otro recién descendido. Ambos equipos comparten objetivo, pero deberán vencer al otro para seguir avanzando. Además, el choque tendrá lugar en Montilivi, conque los rayistas irán como visitantes.
Se trata de un enfrentamiento difícil para los pupilos de Paco Jémez, pero también para él. No podrá contar con Dimitrievski, Advíncula, Andrés Martín ni Akieme. Todos fueron convocados en el compromiso frente al Deportivo de La Coruña y el resultado fue de 3-1.
Ello implica que el entrenador tendrá que echarle imaginación a su once inicial para llevar a cabo las variaciones necesarias sin perder la calidad. Se trata de un rompecabezas que podría solventarse con la titularidad de Luna, Piovaccari o Bebé, pero habrá que esperar a que la pelota eche a rodar.