Y es que Figueroa marcó un 'hat trick' para poner contra las cuerdas a Curicó Unido y atar el triunfo para los de Martín Palermo. Fue entonces cuando el técnico argentino tomó una decisión clave en el encuentro: dejó que Ramiro Carrera se fuera del campo lesionado a falta de pocos minutos.
Con una ventaja tan grande en el marcador, el argentino quería evitar que la lesión fuera a mayores. Y más teniendo en cuenta que contaban con un jugador más sobre el terreno de juego tras la expulsión de Nelson Rebodello por parte de los locales.
Así, Curicó Unido se plantaba en el minuto 87 de partido con 1-4 en el marcador. Blanco inició la remontada a falta de tres minutos del final, Vargas la continuó en el 90' y Quiroga logró lo que parecía imposible en el 92'. Cinco minutos de locura, tres goles y reparto de puntos en La Grana de Curicó.
27 de febrero de 2018