En la historia del fútbol existen porteros a los que se le ha dando bien tanto parar como golear. Hace poco, el último guardameta en escribir su nombre en el libro de aquellos porteros que hicieron un gol con su equipo fue Juan Carlos, que hizo un tanto desde 70 metros de distancia.
En la historia del fútbol podemos encontrar algunos como el de Palop con el Sevilla. El portero logró forzar la prórroga con un remate de cabeza en la Copa de la UEGA que terminó ganando el equipo andaluz.
Otro bastante famoso es el cabezazo de Aranzubia. El portero le dio el empate al Deportivo ante el Almería en 2011.
Toni Prats logró hacer un gol en el Santiago Bernabéu. Fue con la camiseta del Real Betis y al mismísimo Casillas en el año 2000.
A balón parado, Claudio Bravo le clavó un gol al Nàstic cuando vestía la camiseta de la Real Sociedad en la temporada 2009-10.