Paolo Maldini, medio siglo por y para el Milan

Tal día como hoy, pero de 1968, el que hubo sido capitán milanista Cesare Maldini fue padre de Paolo. Un buen puñado de años después, el hijo superó la impronta del padre, algo poco común y que en este caso ya era de por sí una proeza.
Paolo Maldini, considerado por muchos como el mejor futbolista de la historia del Milan, se convirtió en ídolo de la 'Curva Sud' gracias a su amor por la camiseta, una afección que ya no acostumbra a verse. Del Milan Primavera, al primer equipo... y de ahí no se movió.
El 20 de enero de 1985, en el Stadio Communale di Friuli, con el Milan perdiendo 1-0 ante el Udinese, un inédito Paolo Maldini hizo su primera aparición. Por aquel entonces, era más conocido por ser “hijo de Cesare”, pero al final sería el padre el que adquiriría esta etiqueta.
En el descanso de aquel partido de Serie A, Nils Liedholm daba entrada al joven Paolo en sustitución de Sergio Battistini. El Milan acabó empatando el encuentro, pero Paolo Maldini ya había roto el hielo.
Sólo cuatro temporadas después, cuando tenía 20 años, 10 meses y 28 días, ganó su primera Champions League. No solo eso, sino que jugó los noventa minutos en la final. Completaba por la banda izquierda una línea defensiva que ya era superlativa con Tassotti, Costacurta y Baresi.
El Steaua fue subcampeón en aquella final celebrada en Barcelona, con 4-0 para los ‘rossoneri’. El equipo de Arrigo Sacchi revalidaría el título en 1990 ante el Benfica, con una alineación casi calcada. Paolo Maldini jugó, con casi 22 años, su segunda final de la Champions.
Aún tendría tiempo de ganar otras tres Copas de Europa: en 1994, ante el Barcelona (4-0) liderando a “los invencibles de Capello”; en 2003, frente a la Juve en los penaltis, y en 2007, vengándose de un Liverpool que les ganó en 2005, ambas con Carlo Ancelotti al frente.
En lo nacional, consiguió siete ‘scudetti’, una Coppa (la última que ganó el club, en 2003) y siete Supercoppas. En su palmarés también figuran cuatro Supercopas de Europa y un Mundial de Clubes, conseguido en 2008 ante Boca Juniors.
Y obviamente no podíamos olvidar su carrera con la Selección Italiana. Debutó en la Eurocopa de 1988, donde cayó eliminado en semifinales ante la Unión Soviética. Su imparable carrera en el Milan iba en paralelo con Italia: fue titular en la final del Mundial de 1990, ante Inglaterra (2-1), donde ganó su primera y única Copa del Mundo.
Volvió a disputar una final mundialista en Estados Unidos, pero la ‘azzurra’ cayó ante Brasil. Se retiró en 2002 tras caer ante Corea del Sur en octavos. Un final muy polémico y amargo para la carrera de Paolo Maldini en la selección.
Hoy, el eterno capitán del Milan cumple 50 años. 24 temporadas dedicadas al club que lleva en el corazón. Se resistió a dejarlo (se retiró con 40 años), y tras diversas experiencias lejos de los ‘rossoneri’, se baraja su regreso como directivo en el futuro.