Paulinho no es solo calidad, goles y pases clave, también es físico. Lo demostró en la última de sus actuaciones en la Superliga China. Llevaba la pelota por la banda y tuvo que tirar de un par de cargas que el árbitro consideró legales para mantener la posesión.
El esférico lo tenía bastante cerca de la línea lateral, conque tocaba usar recursos para evitar un saque de banda en favor de los rivales. Jonathan Viera y Nico Yennaris se acercaron con la intención de arrebatarle el balón, pero se quedaron con las ganas.
El brasileño, consciente de que no había espacio para algún regate, se puso de espaldas a la pelota y les dio la bienvenida. Tanto al primero como al segundo los desplazó de un par de cargas legales que les movieron varios metros. Gracias a ello, los suyos continuaron con la pelota.
Los futbolistas contrarios se quejaron de que el colegiado no considerara falta ninguna de las dos acciones, pero no les hizo caso. Paulinho se salió con la suya y dejó claro que no solo puede utilizar su calidad, sino también su físico. Lo único negativo del día, que su club acabó empatando.