Lo quiso el Watford, pero la falta de puntería les privó de llevarse la primera victoria tras tres jornadas con el cambio de entrenador. Nigel Pearson debuta con empate en el Vicarage Road ante un Crystal Palace que sigue demostrando que le falta mucho gol si quiere optar a puestos europeos.
El choque transcurrió por los derroteros que se esperaba. Un soporífero encuentro en el que ambos equipos llegaban con la necesidad de llevarse la victoria, por distintas razones, algo que ninguno consiguió.
La primera mitad arrancó con susto para el Watford debido a un tiro de James McArthur que no consiguió llevar excesivo peligro. Pese a ello, podía hacer presagiar otra derrota del conjunto de Hertfordshire.
Aun así, los de Pearson consiguieron sobreponerse al mal inicio y se encomendaron a Ismaïla Sarr para tratar de sacar los tres puntos. El jugador senegalés, junto a Ricardo Pereyra, fue el que protagonizó las ocasiones de mayor peligro, aunque no consiguió que ninguna fructificase.
Con el paso de los minutos, el partido se fue embarrando y ambos conjuntos dieron la sensación de que amarrar un punto era mejor que nada. El final del choque tuvo como protagonista a Troy Deeney, que tuvo en sus botas el único tanto del choque, aunque se quedó sin premio.
Un empate que sirve de poco tanto a unos como a otros, pero que les deja vivos para los objetivos que mantienen para el final de temporada. El Crystal Palace se queda como séptimo clasificado a la espera de lo que hagan Manchester United, Sheffield United, Arsenal y Newcastle.
En cuanto al Watford, la situación se complica, ya que Norwich y Southampton aún tienen que disputar sus respectivos encuentros y pueden dejar todavía más lejana la posibilidad de salvación del cuadro 'hornet'.