El inicio del partido de Italia ante Grecia fue fulgurante. Tras ponerse por delante con un 0-3 en la primera media hora de partido, los italianos seguían queriendo más.
Pero Nicolò Barella seguía a lo suyo. El jugador del Cagliari intentó poner un centro que golpeó en un rival y, antes de salir del campo, toco en él por lo que acabó siendo saque de puerta.
El delantero, con un cabreo enorme, intentó golpear el balón contra la valla publicitaria. Sin embargo, le salió muy alto e impactó en la cabeza de uno de los recogepelotas. El italiano rápidamente fue a disculparse con el joven, sin que pasase a mayores.
8 de junio de 2019