Daba la sensación en un principio de que los sorianos estaban mejor plantados sobre el terreno de juego. De hecho, Vallés tuvo que intervenir en un par de ocasiones para evitar que se adelantaran. La más clara fue de Moha, que probó suerte con un tiro cruzado tras una buena maniobra.
Pero, en un, a priori, inocente centro al área, Kako despejó la pelota con el brazo en lugar de con la cabeza de forma incomprensible. ¿El resultado? Penalti para los locales y gol de Viera. Estuvo cerca de parar el tiro Dani Barrio, pero, después de tocar la bola, esta siguió su curso hacia la red.
El tanto hundió a los numantinos, que se echaron atrás y no fueron capaces de generar peligro en el área rival. Para colmo, apareció Narváez con un golazo desde su casa para sorprender de nuevo al meta, al que le puso las cosas difíciles que la pelota le botara cerca de su posición.
No levantó la cabeza la escuadra visitante, que siguió jugando a verlas venir. Su acercamiento más elaborado se produjo más de 15 minutos después de empezar la segunda parte, con un tiro muy arriba de Higinio. Entretanto, los amarillos seguían llegando y creando oportunidades.
Y claro, tanto va el cántaro a la fuente que al final... Viera aprovechó el rechace de un disparo de Narváez -al que él mismo había asistido- para pillar desprevenido a Barrio y firmar la sentencia y su doblete. La diana terminó por hundir al Numancia, que despertó con un golazo de falta de Escassi.
La espectacular diana del defensa, cuyo disparo dio en el palo antes de entrar, sirvió para hacer que los suyos se vinieran arriba. Aun así, no dio tiempo para más y los isleños aguantaron el ímpetu contrario en lo que quedaba de contienda. Los tres puntos se quedaron en casa.