Lo hacen en el documental 'Take the ball, pass the ball', estrenado este noviembre y en el que se analiza el impacto del FC Barcelona que dirigió Pep Guardiola durante cuatro años, de 2008 a 2012. Xavi, en esta obra, desveló cómo el entrenador preparó la final de la Champions 2011 ante el United.
En esa etapa el Barcelona se convirtió en un equipo legendario. Ganó Champions, Ligas, muchos títulos... y, sobre todo, se incrustó en la memoria de la gente por su fútbol ofensivo. Uno de los mejores o el mejor equipo de la historia a nivel de clubes.
Pero también se habla del club y la forma en que Guardiola salió. El entrenador consideró que su ciclo estaba acabado, pero Víctor Valdés y Dani Alves, jugadores de su plantilla, y Manel Estiarte, campeón olímpico y mano derecha de Pep, creen que la entidad entonces presidida por Sandro Rosell pudo estar más a la altura.
"El míster no tuvo el reconocimiento que debería tener una figura como la que era él para la entidad. Anunciar el día que te vas en una rueda de prensa tu sustituto y hacerlo de esa manera, como lo hicieron con toda la plantilla presente... Yo no vi que fuera la mejor manera de despedir al míster", señala el ex guardameta en el documental.
"Lo más importante de mi vida es ser agradecido a las personas que marcan la diferencia en tu vida", señala por su parte Alves, quien ha loado la figura de Guardiola en varias ocasiones recientemente. "Para mí, Pep tendría que tener una estatua en el Camp Nou", comenta Alves, quien adereza sus palabras con risas. "Y en el palco presidencial, es lo que yo pienso", declara.
Estiarte también ofrece su versión de los hechos. "La sensación que tengo es de nostalgia y tristeza, porque se acabó algo muy bonito, pero había otra otra cosa que me dolía, que era ver que intentaban derrumbar y destruir... ¿Qué motivo había? Al final se gana. Quédate con esto, abraza esto. Cancelemos todo lo bueno que has hecho y lo que nos importa es lo malo que has hecho... El club tiene un problema aquí", detalla.
16 de noviembre de 2018