Tan solo se han disputado 17 jornadas de Liga, sin embargo, los nervios por evitar el descenso abundan entre los equipos que ocupan estos puestos. Dos de ellos se vieron las caras en La Romareda para cerrar un fin de semana loco en la categoría de plata.
Los locales se veían con más obligación por su racha tan negativa en los últimos encuentros. No vencen desde la jornada 13 ante el Nàstic de Tarragona y este domingo tenían una buena oportunidad para impulsarse junto a su afición.
Sin embargo, el Córdoba no iba a dar su brazo a torcer. Curro Torres parece haber afianzado a su equipo en faceta defensiva, aunque le queda mucho que mejorar en el frente ofensivo.
La primera parte comenzó con mucha intensidad. Carlos Abad salvó en los primeros minutos el gol de Álvaro Vázquez, que se adelantó y remató con potencia el centro de Marc Gual, su pareja en la punta de ataque.
El conjunto blanquiverde atacó por ráfagas. De Las Cuevas estuvo cerca de sorprender gracias a un disparo desde la frontal que se perdió rozando el poste. Poco después, Quintanilla se impuso por alto para rematar, pero se marchó por poco.
Tras el paso por vestuarios, el ritmo de juego se desplomó. El cuadro cordobés aguantaba en defensa sin demasiadas complicaciones ante el previsible ataque zaragozano. La Romareda empezaba a desesperarse.
Curro Torres movió el banquillo y casi le sale bien la jugada, ya que el canterano Andrés Martín conectó una volea que salvó Cristian Álvarez con una estirada espectacular. Finalmente, pañolada de la afición, el Zaragoza adelanta al Reus en la clasificación y el Córdoba suma otro punto en la asignatura pendiente lejos del Nuevo Arcángel.