Luka Modric jugó por primera vez como Balón de Oro en el triunfo del Madrid en Huesca. Sufrida victoria del equipo de Solari, en el que solo Bale, Courtois y Odriozola estuvieron a la altura de las circunstancias.
El croata, que fue sustituido entre la ovación de El Alcoraz, no destacó durante los minutos que estuvo en el terreno de juego. Dejó, eso sí, la imagen insólita del encuentro cuando ayudó a Melero López a colocar su transmisor.
Modric también regaló una acción cinco estrellas en la primera parte. Un caño sensacional a Moi Gómez, que creyó robar el esférico al croata antes de que este sacara todo su talento a relucir.
Se le escapó el balón a Modric en una contra blanca, pero resolvió el entuerto con un caño fantástico al jugador del Huesca, que se quedó con el molde en su intento de robar el esférico.