Michael Owen hace tiempo que cambió las botas por los micrófonos. En el césped, su olfato era indiscutible. Fuera de él, parece que el ex delantero sigue percibiendo cosas que no todos pueden hacer.
Al menos, así lo demuestra su teoría sobre Mané y Salah. ¿Genialidad o paranoia? Juzguen ustedes mismos tras las palabras del ex delantero de Liverpool y Real Madrid tras la derrota de los 'reds', que no levantan cabeza, ante el Chelsea.
Sadio Mané pudo ser objeto de penalti en una jugada, pero el senegalés no se dejó caer. Y para Owen, es un claro ejemplo del egoísmo del delantero con Mohamed Salah: "No me puedo creer que no se haya ido al suelo, y no es que esté diciendo que tenga que hacerlo. Quizás pensó que podía hacer algo más después de ese primer toque, ya le pasó la semana pasada ante el Sheffield".
"Me pregunto, y quizás sean pensamientos tortuosos que se arrastran por mi cabeza, si, al ser Salah el lanzador de penaltis, Mané no ha pensado que quizás él pueda marcar en vez de dejar que su compañero anote de nuevo", argumentó Owen.
Owen admitió que le tilden de loco por su pensamiento, aunque insistió en ello y habló de "egoísmo": "Puede que sea una teoría un poco loca, pero dada la naturaleza competitiva que tienen ambos... Ya hemos visto en otras ocasiones que no se pasan el balón".
"Lo que tenemos ante nosotros es una muestra de egoísmo y de mal comportamiento. En otras ocasiones hemos visto a Mané irse al suelo en situaciones como esta, pero, ¿que no lo haga durante dos partidos consecutivos? Eso es raro", concluyó el ex jugador.