Son tiempos oscuros en París por todo lo que ha sucedido esta semana. Este miércoles, el PSG quedó apeado de la Champions contra todo pronóstico en su estadio ante el United.
Los 'red devils' dieron la campanada con un equipo plagado de suplentes y chavales jóvenes, ya que las lesiones se cebaron con el conjunto entrenado por Solskjaer. El triunfo inglés cayó como un jarro de agua fría en la entidad gala.
Neymar, Al-Khelaïfi y la mayoría de los integrantes del Paris Saint-Germain no dieron crédito ante lo sucedido y cargaron contra el árbitro por el penalti final que rafiticó el VAR. Una eliminación que volvió a evidenciar a un equipo acostumbrado a tirar de cartera para fichar.
Para tratar de apaciguar las aguas, el conjunto parisino necesita desconectarse y lo hará este fin de semana. Y es que los de Tuchel descansan esta jornada porque el encuentro contra el Nantes quedó aplazado el pasado 25 de febrero por las manifestaciones de los 'chalecos amarillos' previstas para este fin de semana.
Este movimiento social de protesta comenzó el pasado 17 de noviembre de 2018 y todo tiene que ver con la subida del precio del carbrante. Conforme ha ido pasando el tiempo, las reivindicaciones han bajado.
Al no haber suficientes efectivos policiales para garantizar la seguridad en todo el estadio del Nantes, el organismo que rige el campeonato francés decidió aplazarlo hasta nuevo aviso.