La derrota ante Osasuna en El Sadar dejó tocados tanto al plantel del Levante como a la propia afición. No es para menos, los 'granotas' no ganan en partido oficial desde hace un mes y, aunque la situación no es ni mucho menos crítica, sí que comienza a preocupar.
La buena noticia para la hinchada 'granota' es que el descenso aún queda muy lejos. Y a ello, hay que sumar que el vestuario es consciente del mal momento que atraviesa el equipo, como se encargaron de dejar claro Sergio Postigo y Jorge Miramón tras el encuentro. Ambos coincidieron en "hacer autocrítica".
"Estamos teniendo momentos de desconexión en los partidos que nos están costando muy caro. Hemos tirado todo el esfuerzo por la borda. El penalti de Campaña no nos lo podemos permitir y hay que cambiar el camino y hacer mucha autocrítica", consideró el primero.
Palabras que fueron ratificadas por Miramón, quien también aludió al plano personal. "No he estado muy cómodo ni técnica ni físicamente. Me costaba en cada control, cada acción. No estoy nada contento con mi partido. Al revés, me voy súper cabreado", dijo. El defensa pidió "no dar ni un paso atrás". "Nos tenemos que juntar en el vestuario, tenemos que hablar de lo que sea, hacer autocrítica y tirar para adelante. Hay que sacar esa garra que tenemos", aseveró en tono reivindicativo.