Cómo quemar el trabajo de nueve meses en tres semanas

Mientras remitía la crisis institucional, la crisis deportiva del Ajax parecía tocar a su fin. Sin embargo, el drama ha vuelto a Ámsterdam en forma de debacle histórica. El pasado 13 de abril, hace cuatro jornadas, el equipo de Francesco Farioli era líder de la Eredivisie con nueve puntos de ventaja sobre el PSV Eindhoven. Hoy día, el club de la capital no depende de sí mismo para ganar el título.
Cuando falta tan solo la última fecha del campeonato, la situación es que el PSV lidera la Liga de Países Bajos con 76 puntos, uno más que un Ajax que encadena estos últimos cuatro partidos sin ganar. Este domingo, los 'ajacied' reciben en el Johan Cruyff Arena a un Twente que ya tiene asegurada la previa de la Europa League. Mientras, el conjunto de Peter Bosz, vigente campeón, visita a un Sparta Rotterdam que ultima sus últimas opciones de entrar en el 'top' 8, disputado por al menos cinco clubes.
Ahí está la última oportunidad del Ajax, que por su propio demérito se ve ahora rezando a todo el santoral para que el PSV pinche y la remontada no se materialice. En resumidas cuentas, el trabajo de nueve meses se puede ir por la borda en cuestión de tres semanas fatídicas en las que los de Farioli ha caído goleados por Utrecht (4-0) y Nijmegen (0-3 en su propia casa) y no han pasado del 1-1 con el Sparta y del 2-2 con el Groningen, que además rascó el empate en el minuto 99 y con un jugador menos.
Sorprende sobre todo en un grupo que cuenta con la veteranía de futbolistas como Jordan Henderson y Davy Klaassen, el portero Remko Pasveer o los delanteros Steven Berghuis y Wout Weghorst, y en el que también crecen jugadores de la pujanza de Jorrel Hato o Mika Godts. Hay jugadores con el nivel y la experiencia suficiente para no pagar estas novatadas. Además de ese 2-2 en el último instante, el Ajax también encajó contra el Sparta en el 95' y tuvo que igualarlo por medio de Youri Regeer en el 97'.
Hablábamos de crisis institucional porque los últimos años han sido muy agitados en el Johan Cruyff Arena. Erik ten Hag ganó en 2022 la 36ª y última Eredivisie y a partir de ahí han cambiado piezas de arriba a abajo entre escándalos como el de Marc Overmaars, quien tuvo que dimitir reconociendo haber enviado mensajes inapropiados a varias empleadas del club. Aquello ocurrió antes de la salida del técnico al United, pero en 2023 fue suspendido durante un año por el Tribunal Deportivo.
Otro hombre importante del club que cayó fue Edwin van der Saar, aunque en su caso, por cuestiones exclusivamente deportivas. El ex portero lo dejó en junio de 2023 tras 11 años en el club, primero como director de marketing, después como director deportivo y finalmente como CEO.Fue consecuencia de un mal año en el que su equipo quedó tercero. Lo que no esperaban es que al siguiente serían quintos, quedando por primera vez fuera del 'top' 4 desde el año 2000 y firmando su primera campaña sin jugar ni la previa de Champions desde la 2009-10.
Por incidir en la locura que ha sido el Ajax en los despachos, en sustitución de Van der Saar llegó Alex Kroes. Sin embargo, este sería cesado en abril de 2024 por el presunto uso de información privilegiada para adquirir 17.000 acciones del club antes de ser nombrado presidente. Un lío más, aunque al final acordó volver al puesto de director técnico y el pasado 25 de abril se libró de cualquier sanción. Hoy día aún sigue al frente un CEO interino (Menno Geelen) a la espera de conformar una nueva directiva.
Mientras tanto, por el césped han desfilado hasta seis entrenadores distintos en estos tres años: Alfred Schreuder, Johnny Heitinga, Maurice Steijn, Hedwiges Maduro (interino), John van't Schip y el actual, el italiano Francesco Farioli. El primer técnico extranjero desde Morten Olsen en 1998. Y en Países Bajos ganaban primero el Feyenoord de Arne Slot y el PSV de Peter Bosz, con el que ahora se la juega. Parecía que el Ajax estaba de vuelta, pero esta racha puede ser un sótano más en el descenso a los infiernos del más grande del país. Todo dependerá de si hay milagro o no.