Víctor Valdés no ha empezado con buen pie en el Juvenil A del Barcelona. No tanto por el aspecto deportivo, donde ha alternado buenos resultados con algún que otro tropiezo. Pero sí que está chocando con el club por su peculiar forma de ser.
Los años no han cambiado al ex portero, que siempre se caracterizó por ir de cara sin importarle lo que le pudiera costar.
En 'Mundo Deportivo' recuerdan el episodio de la Youth Otten Cup, donde decidió no disputar la final de consolación alegando proteger a sus futbolistas.
También profundizan en un descontento surgido en el estreno del Estadi Johan Cruyff. Valdés decidió no utilizar para el choque a muchos suplentes, que se perdieron una jornada histórica.
Para colmo, Valdés fue expulsado en uno de sus dos primeros partidos, lo que le costará dos choques de suspensión con el club azulgrana.
Y, según el citado medio, lo que más ha disgustado a la disciplina azulgrana ha sido la ausencia del técnico a la cena de entrenadores de La Masia. Una negativa a asistir que se une a sus discrepancias con el departamento de Comunicación del Barcelona.
Además, sus resultados no han logrado acallar estos problemas. Comenzó empatando en Liga y se impuso al Girona en el choque en el que fue expulsado. En su estreno en la Youth League, cayó en Alemania por 2-1 pese a adelantarse en el marcador.