Araujo, como Pedri, se lesionó en el partido de Liga del Barcelona contra el Sevilla. En su caso, además, se trató de una recaída, pues venía aquejado de un esguince en el tobillo izquierdo. Él, en el campo, incluso se alteró porque quería continuar, pero su entrenador optó por darle descanso.
El defensa se hizo daño en una acción con En-Nesyri. El delantero hispalense maniobraba en el área para disparar a la media vuelta -de hecho, lo logró- y el uruguayo le marcaba. Al final, de tanto moverse de un lado a otro para tapar huecos, se torció la extremidad antes referida.
Desde la banda, cuando le estaban atendiendo, se pudo comprobar fácilmente que lo que él deseaba era seguir en el campo. Ya se ofreció a infiltrarse para estar en el duelo de Champions League contra el PSG, lo que habla muy bien de su compromiso como azulgrana.
El problema es que, ahora, el foco estará en el siguiente entrenamiento. Ronald Koeman tendrá que prestar especial atención a su evolución. Más bajas en defensa no le vendrían nada bien, pues el Barça encara varias citas importantes entre las que se encuentran la visita al Parque de los Príncipes.