Cuando su carrera se acercaba a una retirada en silencio, Marco Borriello se encontró con el proyecto de la UD Ibiza, iniciado por el ex dirigente valencianista Amadeo Salvo. El histórico delantero italiano debutó este domingo con su nuevo equipo, sumando una derrota y no pudiendo ayudar con su primer gol.
En las últimas horas, Borriello repasó en 'La Gazzetta dello Sport' los porqués de su fichaje por el cuadro ibicenco y explicó lo que espera de esta nueva aventura. "Sé que había mucha ironía sobre mi elección, pero no me importa. Amo el fútbol y todavía lo vivo con gran seriedad, pero también quiero devolverle a esta isla parte de lo que me ha dado", aseguró.
En su mente, que el himno de la UD Ibiza se convierta en un tema de referencia en las fiestas de la isla: "Mi desafío es llevar al Ibiza a lo más alto, a la Liga. Sueño con que el himno del club sea interpretado por los DJs más importantes del mundo, que tocan aquí a menudo".
Borriello, además, no tuvo reparo en hablar de la fama de mujeriego que siempre le ha acompañado. "En todos los lugares donde jugué, si excluimos Ferrara, siempre he sido un ídolo de los fans. Por un lado, las fotos con todas esas bellas mujeres me han penalizado. Por otro, me han dado visibilidad".