Sergio Ramos se ha tenido que ir a la ducha antes de tiempo en tres de los últimos nueves partidos contra el Barcelona.
La temporada pasada, el central fue expulsado por roja directa en el 'Clásico' del Bernabéu por una dura entrada a Messi a 13 minutos del final del partido.
En el curso 2015-16, esta vez en el Camp Nou, Ramos tampoco terminó el encuentro, ya que recibió dos amarillas y se fue al vestuario en el minuto 83. El Madrid ganó ese partido (1-2).
En la temporada 2013-14, el defensa vio otra roja directa en la vuelta de Liga en el Bernabéu y tuvo que dejar el campo en el 64'. También sufrió otras dos expulsiones más en la 'era Mourinho'.
Esta campaña logró no ser expulsado en los primeros duelos ante el Barcelona, con la Supercopa de España en juego, pero todos saben que el capitán del Madrid es de sangre caliente y tendrá que tener cuidado para no volver a dejar a su equipo con 10 jugadores en un encuentro decisivo.